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El regreso de la Fragata: nacional y popular pero con "sello K"

El regreso de la Fragata Libertad se convirtió en un acto partidario. No es la primera vez que el Gobierno se "adueña" de una causa que le pertenece a todos los argentinos.

Por Nieves Otero

@nieves_otero

notero@diarioveloz.com

Luego de días de espera, la Fragata Libertad regresa al país y el Gobierno Nacional tomó el tema como propio, haciendo de la vuelta del buque escuela, un triunfo propio.

En un acto a puro color y  con un show aéreo, la presidente Cristina Fernández de Kirchner recibe a la Fragata que fue retenida en Ghana durante casi tres meses.

A rigor de verdad, el Gobierno no hizo más que lo que tenía que hacer gestionando la vuelta del barco, sin embargo, la celebración por el arribo es utilizada por el kirchnerismo y parece más un acto partidario que otra cosa.

No sería la primera vez que desde la Rosada toman como propias una causa que es de todos y la utilizan a su favor. Convierten un acto político o un suceso nacional que debería ser apartidario, en un acto de su militancia.

Desde el kirchnerismo anuncian con bombos y platillos la llegada del buque escuela como si fuera un logro propio, cuando en realidad, no habría que festejar la vuelta de la Fragata, sino cuestionarse su retención.

La Presidente aprovechó la ocasión para hacerse "autobombo" y hacer un acto adulatorio hacia ella, su gestión y su partido, cuando en realidad, la Fragata no debería tener ninguna bandera más que la Argentina.

La utilización política de causas, fechas, símbolos y situaciones que son de todos, por parte del Gobierno, no es nada nuevo.

Sólo por nombrar algunas, podríamos recordar la "Fiesta del Bicentenario", una de las primeras fechas populares utilizadas por el Gobierno Nacional para hacer política a su favor. Se trataba de una conmemoración que involucraba a todos los argentinos y habitantes del país, de todas las generaciones, clases y partidos. Sin embargo, tuvo que tener su "sello K".

El 10 de diciembre fue declarado por medio de una ley como "El Día de la Democracia", en conmemoración a la misma fecha, pero de 1983, cuando Alfonsín asumió la presidencia luego del último golpe de Estado. Sin embargo, en el 2012, el kirchnerismo utilizó la fecha para hacer un "acto de la  Democracia" con ellos como protagonistas y los militantes K como espectadores. 

¿Cómo? Si es la fiesta por el Día de la Democracia ¿No deberían participar todos los argentinos, san del partido que sean?

Esos son sólo algunas fechas argentinas que el Gobierno se puso al hombro y utilizó como propias a pesar de ser realmente "nacionales y populares" y pertenecer a todos los argentinos.

Lamentablemente la lista es larga y a los hechos mencionados podríamos agregarles otras cuestiones s las que se le indebidamente el  "sello K", como el último acto por el Día de la Lealtad, en el que el homenaje fue para Néstor Kirchner más que para Perón; YPF;  la Tv Pública; y más.