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El kirchnerismo recurrirá a la Justicia para evitar que cierren la línea A de subtes

La diputada María José Lubertino presentará un recurso de amparo para que se garantice la continuidad del servicio, después de que el gobierno porteño haya pautado el cierre para el 12 de enero.

Después del traspaso del subterráneo, parecía que la pelea entre el Gobierno nacional y el porteño finalizaría. Pero no. Ahora parece que se reavivan las diferencias, a partir de la reforma de la línea A, que tendrá a este servicio interrumpido desde el 12 de enero.

Es que el kirchenrismo irá a la Justicia para frenar el cierre del subte que cubre el trayecto entre las estaciones Plaza de Mayo y Carabobo. La legisladora kirchnerista María José Lubertino presentará mañana un amparo para que el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires garantice la continuidad servicio.

"Con el cierre de la línea A por tiempo indefinido se está causando grave perjuicio a los derechos de los usuarios de subtes, ello sin garantizar mínimamente una prestación supletoria que permita a los usuarios movilizarse sin que implique un colapso del transporte público terrestre y el consecuente perjuicio para los usuarios de este último", señaló la diputada.

Para fundamentar su reclamo, Lubertino se apoya en las manifestaciones de diversos expertos, que consideraron que el cambio de la flota de coches se podría realizar sin tener que suspender el servicio por casi dos meses.

"Tampoco resulta urgente cerrar la línea por motivos técnicos, considerando que es la que ha registrado menos averías e incidentes en sus 99 años de servicio, y la que mayor inversión en seguridad y renovación de infraestructura ha recibido en los últimos siete años", destaca Lubertino.

Por otra parte, la diputada reclamó por la continuidad laboral y comercial de los locales que funcionan en dicho subterráneo: "El mayor problema se refleja en que a causa del cierre de la línea no existirá flujo de pasajeros que consuma en los negocios".

Finalmente remarca su inquietud por lo que sucederá con los coches "La Brugeoise"; en ese sentido, Lubertino y el diputado Aníbal Ibarra ya habían presentado un proyecto  para la protección patrimonial de la flota mencionada.