DOLAR
OFICIAL $816.08
COMPRA
$875.65
VENTA
BLUE $1.18
COMPRA
$1.20
VENTA

Efectos del caso Barbie Vélez - Fede Bal: la dependencia desmedida, la posesión y la violencia de las relaciones tóxicas

La psicóloga Liliana Alfuzzi analizó con DiarioVeloz la influencia de los medios, las señales previas y la ascendencia en jóvenes

El escándalo amoroso-mediático entre Barbie Vélez, la hija de Nazarena Vélez, y Federico Bal, el hijo de Carmen Barbieri, tomó estado trascendente por haber salido a la luz situaciones violentas extremas. En este contexto, DiarioVeloz consultó a la psicóloga Liliana Alfuzzi sobre la forma de identificar este tipo de vínculos conflictivos y cómo influyen los medios en la exposición.

"Las relaciones tóxicas tienen que ver con la presencia de diferentes violencias. Existen vínculos en los cuales suele haber una necesidad de control, de posesión de uno sobre otro. Uno tiene el control de todo. Es un vínculo en el cual existen muchas dificultades para registrar al otro, sus deseos o necesidades", comienza a explicar Alfuzzi.

"Suele haber siempre desconfianza. 'Ella es mía', piensa él. A veces la manipulación y la victimización están presentes. 'Me pongo loco por tu culpa', le reprocha. También tienden a pensar que lo hace por amor. Estas relaciones son de dependencia y suelen relacionarse con una gran inmadurez emocional", agrega la psicóloga.

Alfuzzi no considera, en base a estudios, que la tendencia de personas inmaduras no significa necesariamente que esto se dé en adolescentes y jóvenes. "Existen señales desde el comienzo de la relación. Por eso es muy importante que de ambos lados estén atentos a estas apariciones. La edad cronológica no modifica esto; sí un tratamiento psicoterapéutico", aclaró.

La influencia de los medios en una relación tóxica, como en el caso de Barbie y Fede

Con respecto a esto, Alfuzzi no cree que la exposición mediática juegue un papel preponderante ni tenga relación con los recursos que cada persona posea al momento de vincularse con otras personas.

"Los medios tienen una gran responsabilidad social en la forma en la que tramiten estos temas. El gran impacto de lo espectacular y de las imágenes en estos tiempos es algo indiscutible. Creo que no se debe sostener o reproducir modalidad patológica en la forma en la que se cuenta la noticia", opinó.

"Los medios en este sentido no deben ejercer violencia mediática que se da cuando publican imágines estereotipadas que promueven la objetivación de la mujer, su discriminación o su humillación", añadió.

"En este caso, es muy importante no legitimar ninguna forma de violencia. No hay discusión alguna en una pareja que legitime violencia de género, ni tratar de insinuar que se lo buscó o se lo merecía. Hay que ser muy cuidadoso en esto porque la formación de estos patrones socioculturales que los medios colaboran a crear pueden reproducir desigualdades, siendo, de esta manera, generadoras de más violencia. La violencia de género no puede comprenderse sin su dimensión política, ya que es una relación de poder, desigual", explicó Alfuzzi.