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Detuvieron al prófugo por el crimen durante el Día de la Primavera

El joven de 21 que estaba prófugo por el crimen del joven Jonathan Villalba, asesinado a golpes tras los festejos del Día de la Primavera en la localidad bonaerense de Mercedes, fue detenido esta noche en Moreno, informaron fuentes policiales.

El joven, identificado como Pablo Ventosa, fue apresado por efectivos de la Departamental de Investigaciones (DDI) Mercedes por orden del fiscal a cargo de la causa por el caso, Pedro Illanes.

La detención se produjo horas después de que la madre de Jonathan, pidiera que se investigue la participación en el hecho de una "patota" de al menos 15 personas.

Nélida Iranzo habló esta tarde durante una movilización en la plaza San Martín de Mercedes para reclamar justicia y el esclarecimiento del crimen, por el que por ahora hay un adolescente de 13 años demorado y Ventosa detenido.

"No encuentro explicación, no caí todavía, pero mi hijo me da fortaleza para que haga justicia por él", dijo la madre de Jonathan al encabezar la protesta junto a amigos, compañeros y familiares de la víctima.

Aseguró que, cuando su hijo fue internado, le contó: "Mami me caí, no me pude levantar porque eran muchos y me empezaron a pegar" y le pidió al fiscal Illanes, que investigue "bien" porque, a su entender, "fue una patota de alrededor de quince personas y hay que buscarlos".

La inhumación de los restos de Jonathan se realizó esta mañana, cerca de las 11.30, en el cementerio de Mercedes, situado en calles 10 y 146, de esa ciudad.

Previo a ello se realizó el velatorio en la cochería "Silva", ubicada en la calle 37 al 300, que concluyó a las 10.30, cuando el cortejo partió rumbo a la catedral local.

Al llegar a ese lugar para llevar adelante un responso previo a la inhumación, los familiares y allegados a Jonathan advirtieron la presencia del intendente de Mercedes, Carlos Selva, quien concurrió acompañado de un secretario para participar de la ceremonia religiosa.

Los familiares se mostraron molestos con su presencia y lo acusaron de ser "el responsable de que en Mercedes no haya seguridad", motivo por el cual Selva debió abandonar la catedral y permaneció unos minutos en la plaza situada enfrente, hasta que se retiró.

"Gordo te amamos", "Vamos a llegar hasta las últimas consecuencias" y "Justicia", fueron algunas de las frases que pronunciaron los cuatro hermanos y padres de Jonathan cuando colocaron el cajón en el nicho.

Hoy, uno de los hermanos de Jonathan aseguró que los jóvenes que atacaron a golpes y mataron a su hermano "son del barrio" y pidió "no discutir si son chicos bien o no".

"Los que le pegaron a mi hermano son todos pibes del barrio y no hay que mezclar las cosas ni discutir si son pibes de bien o no. Sólo lo mataron", expresó Gabriel.

"A mi hermano lo torturaron y él no se merecía esto. Espero que detengan al pibe que está prófugo porque yo los quiero ver a todos presos", agregó.

Al respecto, el jefe de la policía bonaerense, Juan Carlos Paggi, explicó que "se habló de enfrentamientos de bandas y situaciones entre colegios", y descartó que esos hayan sido los motivos de la muerte del joven.

"Creo que esto tuvo que ver más con otro tipo de diferencias, como barriales. Este era un chico de los buenos, que no se peleaba con nadie, pero a altas horas de la noche se encontró con otros chicos que tendrían alguna diferencia y se pelearon y lo agredieron de tal manera que produjeron lesiones muy serias", consideró en declaraciones a Radio Provincia.

Al mismo tiempo, el jefe policial provincial destacó que "hay que ver el resultado de la autopsia porque aún no quedan claras las razones por las que perdió la vida, más allá de que tenía serias lesiones".

El crimen se produjo cerca de las 2.30 de la madrugada del miércoles último, al finalizar los festejos del Día de la Primavera en la ciudad de Mercedes.

Según pudieron determinar los investigadores, Jonathan fue sorprendido cuando regresaba caminando a su casa por varios muchachos con los que había discutido horas antes.

Los agresores comenzaron a atacarlo con un hierro y con armas blancas y le provocaron heridas en la cabeza y en el torso tras lo cual lo dejaron abandonado.

Se cree que Jonathan logró refugiarse entre los pastizales linderos a una fábrica abandonada y allí quedó inconciente varias horas hasta que se despertó y comenzó a pedir ayuda, momento en que fue oído por un albañil que alertó a la policía.

El muchacho, de 18 años, fue llevado a un centro asistencial de la zona pero murió mientras era atendido.