Desarrollan una IA capaz de predecir cómo actuará una persona en el futuro

Una startup argentina está liderando un nuevo salto tecnológico en el campo de la inteligencia artificial y el comportamiento humano. Tras años de desarrollo, investigadores locales presentaron una IA capaz de anticipar cómo una persona actuará, decidirá y se vinculará en el futuro. La innovación va más allá de los modelos tradicionales de evaluación y plantea un enfoque dinámico, predictivo y personalizado, con base científica y orientación humanista.

El proyecto, llamado Nawi, es la evolución directa de la tecnología que Nawaiam había popularizado en el ámbito de los recursos humanos: un videojuego que, en solo 15 minutos, ofrecía un diagnóstico preciso del perfil conductual del usuario. Ese sistema —utilizado por más de 500 organizaciones en 18 países— brindaba un mapa claro de actitudes y aptitudes. Sin embargo, su alcance tenía un límite natural: el resultado era una “foto” del momento. Una imagen estática de quién era la persona al instante de la evaluación.

Con Nawi, ese límite desaparece. La nueva inteligencia artificial, desarrollada junto con la firma estadounidense Neuraldinamica LLC, rompe esa barrera y propone un modelo distinto: en lugar de observar un comportamiento pasado o presente, proyecta el futuro del individuo. Lo hace mediante un sistema complejo de análisis que no se limita a etiquetar o clasificar, sino que interpreta y acompaña la evolución conductual en tiempo real.

El corazón de esta tecnología es el Sistema de Singularidad Conductual (SSC), una arquitectura de cuatro capas que integra elementos de la psicología, la neurociencia, la sociología de redes y hasta la física cuántica para construir un modelo predictivo único por individuo.



Cada capa cumple una función específica:

Núcleo Psicológico: Es el “software base” del comportamiento. Reúne y sintetiza múltiples modelos psicométricos reconocidos —como DISC, MBTI, OCEAN, Belbin, Cloninger, Fogg y otros— para definir la estructura psicológica de la persona. Responde a la pregunta: ¿Quién es este individuo?

Contexto Social: Funciona como un “sistema operativo” que analiza la red social, económica y cultural que rodea al sujeto. Utiliza teorías de redes complejas (como las de Glattfelder) para entender cómo el entorno condiciona sus decisiones. Responde: ¿En qué entorno opera y qué presiones lo afectan?

Puente Neurobiológico: Inspirado en la Teoría Polivagal de Stephen Porges, esta capa actúa como el “hardware fisiológico” que traduce ese contexto en estados del sistema nervioso (seguridad, amenaza o colapso). Responde: ¿Cómo siente internamente lo que ocurre a su alrededor?

Interfaz Perceptual: Basada en conceptos de física participativa, es el filtro a través del cual la persona percibe, interpreta y crea su realidad. Responde: ¿Cómo construye su visión del mundo a partir de sus estados internos y su contexto?



Un nuevo enfoque: del espejo al río

Mientras las herramientas tradicionales ofrecen un diagnóstico fijo —“esta persona es así”—, el nuevo enfoque propone una visión dinámica y evolutiva: la persona no es, sino que está siendo y podría llegar a ser según sus condiciones internas y externas.

El salto de paradigma es evidente. Ya no se trata solo de clasificar perfiles, sino de acompañar trayectorias. Un ejemplo ilustra el cambio: ante un perfil que tradicionalmente sería etiquetado como “concienzudo”, el sistema ahora puede anticipar cómo ese individuo —por su herencia emocional, contexto social y percepción del cambio— reaccionará con rigidez ante situaciones de inestabilidad económica global.

Tecnología al servicio del ser humano

Además del componente predictivo, el sistema fue diseñado para generar una interacción constante con cada usuario. No está orientado exclusivamente a empresas, sino que apunta a ser una herramienta individual de autoconocimiento, evolución y bienestar.

Como explica Horacio Llovet, CEO y cofundador de Nawaiam, “Nawi no es una herramienta para empresas, es una tecnología para la humanidad. Durante años ayudamos a entender el presente de las personas. Ahora ayudamos a anticipar su futuro”.

A diferencia de la narrativa distópica que suele asociarse con la inteligencia artificial, esta tecnología propone una alternativa esperanzadora: no reemplazar al ser humano, sino brindarle más recursos para comprenderse, adaptarse y crecer.

Con base científica, ética y latinoamericana, Nawi redefine las reglas del juego en el campo de la inteligencia artificial aplicada al comportamiento humano, posicionándose como un desarrollo pionero a nivel global.

El lanzamiento de esta IA marca un antes y un después en la forma de comprender la conducta humana. En un mundo atravesado por la incertidumbre, la capacidad de anticipar cómo actuamos y decidimos podría ser una de las herramientas más valiosas del futuro.

¿Puede una IA ayudarnos a conocernos mejor que nosotros mismos?

La discusión recién empieza.