DOLAR
OFICIAL $816.08
COMPRA
$875.65
VENTA
BLUE $1.18
COMPRA
$1.20
VENTA

Condenaron a un ex basquetbolista a prisión perpetua

Alejandro Bertotti es culpable por el asesinato de su esposa Natalia Vercesi que fue asesinada de 24 puñaladas en 2009, cuando estaba embarazada de seis meses y dos semanas. Misma condena recibió Leonardo Forti, quien también estuvo involucrado en el crimen.

El ex basquetbolista Alejandro Bertotti y Leonardo Forti fueron condenados hoy a prisión perpetua por el crimen de la esposa del primero de los acusados, Natalia Vercesi, la joven embarazada que en 2009 fue asesinada de 24 puñaladas en su casa de la ciudad cordobesa de San Francisco.

La decisión fue dispuesta por la Cámara en lo Criminal y Correccional de dicha ciudad del este de la provincia de Córdoba y ocho jurados populares.

Esta mañana, en sus "últimas palabras" del proceso, Bertotti (37), quien siempre se declaró inocente, expresó que estaba "viviendo una pesadilla" y sostuvo: "Pido Justicia especialmente por mi hija, Julieta".

Mientras que Forti (21) aseguró no haber matado a nadie y le recriminó al fiscal que instruyó la causa, Bernardo Alberione, no haberle dado acceso a un centro de rehabilitación tal como le había prometido.

Antes de los acusados, declaró la madre de Natalia, Rita Ercole, como particular damnificado, y pidió que se haga "Justicia".
 
Tras un cuarto intermedio, en un clima de tensión y expectativa, y bajo fuertes medidas de seguridad, el tribunal se limitó esta tarde a leer la parte resolutiva de la sentencia y, debido a la complejidad de la causa, difirió para el 30 de este mes la lectura de los fundamentos del fallo.

En el caso de Bertotti, los jueces decidieron de manera unánime condenarlo por los delitos de "homicidio calificado por el vínculo, alevosía y pago de precio en concurso ideal, y aborto en concurso real".

Mientras que Forti fue condenado por mayoría por "homicidio calificado por alevosía y pago de precio en concurso ideal, y aborto en concurso real".

Además, el tribunal ordenó que se remitan las actuaciones al fiscal federal de turno ante la posible comisión de un delito contra la Ley de Estupefacientes ya que, en su declaración, Bertotti señaló como móvil del hecho un supuesto negocio para la venta de drogas con Forti y el hermano de este, Diego.

Luego de conocerse el fallo, Víctor Vercesi, padre de la víctima, manifestó a la prensa: "Alivio no vamos a tener nunca, porque esto nos ha quebrado la vida".

"Hace bastante tiempo que no le creo a Bertotti, desde que comencé a leer el expediente abierto por la causa", agregó.

Por su parte, la madre de Natalia se expresó en el mismo sentido: "Estoy mal y, al mismo tiempo, por lo menos, se hizo justicia, pero queda una criatura de por medio (la hija que ya tenían Bertotti y la víctima). Eso es lo más triste de todo, porque, en algún momento, va a haber que decirle la verdad".

En tanto, Marcelo Brito, abogado de Bertotti, anticipó que seguramente planteará un recurso de casación contra la sentencia porque, según dijo, "hay elementos de prueba que acreditan sin discusión que acá hubo un procedimiento irregular".

Es que el letrado, al igual que la defensa de Forti, había solicitado la absolución del acusado.

Sin embargo, el tribunal no sólo condenó a Bertotti sino que también rechazó el pedido de Brito de que se excluyera como prueba la primera declaración de Forti en la que éste confesó que el viudo le había pagado para que lo ayudara a atacar a la víctima.

"De lo que estamos absolutamente seguros es que, respecto del punto primero, que resuelve rechazar la exclusión probatoria, a lo que habían adherido incluso los colegas que defendían a Forti, tenemos razones jurídicas expuestas en su momento que  sostendremos y que, seguramente, van a dar razones a nuestro recurso", remarcó el abogado defensor.

La semana pasada, en su alegato, el fiscal Víctor Pezzano había pedido la prisión perpetua para ambos acusados por considerar que el crimen se trató de un "plan urdido por Bertotti y aceptado por Forti" y que los dos imputados "tenían el mismo objetivo: matar a Natalia. Bertotti la quería matar por odio y Forti, por la plata".
 
De acuerdo con la acusación sostenida por Pezzano, Forti "comenzó a ejecutar el hecho, tal cual como se había planificado con Bertotti", para lo cual recibió unos 5.500 pesos por parte del ex basquetbolista.

El hecho ocurrió el 8 de julio de 2009, en una casa situada en Urquiza 94, de San Francisco, donde residía el ex basquetbolista y actual kinesiólogo, Vercesi (27) (embarazada de 24 semanas), y la pequeña hija del matrimonio.

De acuerdo con la imputación, el día del crimen, Bertotti facilitó el ingreso de Forti a la vivienda familiar, escondiéndolo en la parte trasera de su auto, para luego simular un asalto y ayudarlo a matar a Vercesi.

Tras ser detenido, Forti confesó el pago de parte del ex basquetbolista, por lo que Bertotti, quien inicialmente había dado a la Policía la versión de que él y su mujer habían sido víctimas de un robo, también terminó detenido.