Cómo tener oreja de duende
No hay pócimas ni palabras mágicas que valgan. ¿Querés escuchar historias de elfos? ¿Querés parecerte al Sr. Spock sin quemarte el cartílago? Hay opciones.
Si querés evitar que tu cirujano amigo resuelva tu necesidad con un par de tajitos, para ser un poco elfo te podés hacer aplicar una prótesis. Puede ser casera o realizada por especialistas en Efectos Especiales.
El camino más corto y seguro es comprar un par de orejas de elfo, de un alien o cuernos del diablo en una casa de disfraces. Lo importante es que sea de látex, que es un material fácil de moldear. Si la forma de la oreja que te vendieron no es la que tu oreja necesita, deberás conseguir una pinza y acercarte hasta la cocina. Sobre la hornalla, calentá la goma y afilale la punta. Si no te animás, pará la oreja y escuchá a los expertos.
En la Argentina, los más cancheros son los chicos de la Academia de Efectos Especiales "Metamorfosis FX", los mismos que organizan la "Marcha Zombie". A propósito de la prótesis élfica, hablan claro: "Sinceramente no hace falta iniciarse en los misterios de los mundos élficos para ponerse una oreja de éstas, es bastante fácil", explica Gerardo Berstein, fundador de la Academia. "Pero si necesitan una mano, acá tenemos varias de látex y de otros materiales que son tan reales que aterrorizan a cualquiera", bromea. "Lo ideal es clavar el apósito en un fierro de brochette, dorarlo vuelta y vuelta e, inmediatamente después, dar la forma con la ayuda de la pinza", continúa, aunque no queda claro si habla en serio. Si no te animás a hacerlo, entonces sí, valdrá la pena que recurras a un profesional del maquillaje.
Lo bueno es que resuelven la milonga sin cortes físicos o implantes de silicona. "Uno nunca sabe cuándo quiere dejar de ser elfo para convertirse en una espantosa alimaña mutante. Siempre hay que dejar las puertas abiertas para empeorar tu imagen", continúa el artista.