DOLAR
OFICIAL $816.08
COMPRA
$875.65
VENTA
BLUE $1.18
COMPRA
$1.20
VENTA

Cine "libre": ¿Qué es y dónde verlo?

En un mundo donde Internet es un espacio ilimitado y donde el copyright está obsoleto, surgieron nuevas formas de difundir y ver cine.

Internet redefinió para siempre el modo en el que creamos, accedemos y difundimos casi cualquier tipo de producto cultural y una de las áreas que se vio definitivamente afectada fue el cine.

Los nostálgicos o conservadores podrán decir, por ejemplo, que los sitios web para ver películas online acabaron con los videoclubs, perjudican a las salas de cines y fomentan la piratería que arruina los bolsillos de los realizadores cinematográficos. Sin embargo, afortunadamente hay otra corriente cada vez más fuerte y mucho más optimista: Internet posibilita el acceso a un material que antes era más complejo o directamente no existía y genera un espacio para que más personas puedan crear y distribuir sus propios contenidos.

El cine es cada vez menos ese arte restringido para pocos afortunados y hoy son muchos más, tanto los que pueden ver una gran cantidad de películas como los que pueden crearlas.

Pero cuando se debate sobre los sitios para ver películas online hay un error común y es creer que gran parte de lo posteado es ilegal, considerando que los derechos de autor de esos filmes son violados por ser reproducidos sin la autorización de sus autores.

Habrá casos en lo que esto es así pero también hay realizadores y productoras que deciden "liberar" sus propias películas bajo la idea del copyleft.

¿Qué significa esto? no quiere decir que una película no tenga derecho de autor o copyright , sino que su creador decide otorgar algunos derechos a terceras personas bajo ciertas condiciones. En general, un material con este tipo de licencia se puede copiar, distribuir, mostrar y ejecutar en su totalidad o una derivación del mismo, ya sea con propósitos comerciales o no, según la elección del autor, exigiendo que los mismos derechos sean preservados en las versiones modificadas.

Lo cierto es que el copyright fue creado mucho antes de la aparición de Internet y hoy implica un vacío legal para legislar los contenidos. Nadie va a dejar de ver películas en Internet o bajar contenidos por más preocupantes que parezcan las advertencias. Y por esto, los casi únicos que siguen defendiendo esta licencia obsoleta son las grandes corporaciones y grupos dominantes que recaudan ganancias a partir del talento de los artistas.

En definitiva, el copyleft o el tipo de licencias Creative Commons, intentan promover el intercambio de ideas y aprovechar el espacio ilimitado que ofrece Internet para asimilar, compartir, pensar y transformar los conocimientos artísticos, académicos, culturales, sobre el dominio de derechos de unos pocos.

Cada vez más organizaciones o particulares apoyan este tipo de iniciativas. En Buenos Aires el año pasado se fundó el Festival Buenos Aires Creative Commons con el objetivo de brindar un espacio para difundir este cine y discutir este tipo de temáticas.

También existen sitios web como Peliplay.com que es una plataforma para visualizar en streaming películas y documentales Creative Commons.

Mismo en sitios como Youtube cada vez se pueden ver más largometrajes completos con este tipo de licencias para que puedan ser vistos sin restricciones una y otra vez.