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Castelar, el nuevo Once, y la "revolución ferroviaria" que no llegó

Otra vez la inoperancia de los funcionarios terminó produciendo una tragedia ferroviaria. Otra promesa incumplida.

Otra vez la tragedia en las vías del ferrocarril de la línea Sarmiento. Otra vez un choque, las sirenas, las corridas, la desesperación, los heridos y las muertes...

La mañana del jueves 13 de junio del 2013 quedará en la memoria colectiva, tal como sucedió con la mañana del 22 de febrero del 2012. Lamentablemente el denominador común es la tragedia ferroviaria: Castelar es el nuevo Once.

Tras la gran tragedia de Once, que dejó como saldo 51 fallecidos y más de 700 heridos, se puso en foco la situación de los trenes: la escasa inversión que se había hecho en los últimos años y la inutilización de los subsidios, entre otros puntos. Por tales inoperancias, el por entonces secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi fue destituido y asumió el cargo el actual Florencio Randazzo.

"Puedo asegurar que, cuando todo eso esté funcionando, se va a notar una verdadera revolución en el transporte", había dicho Randazzo en enero, y cuando lo consultaron sobre cuándo comenzaría a notarse el cambio, dijo que "en los próximos 60 días, con seguridad". ¿Y qué pasó?

¿Qué cambió en un año y cuatro meses, tiempo prudente para actuar después de una de las tragedias ferroviarias más importantes del país? A juzgar por los hechos podríamos decir que nada. Porque acá se trata de brindar seguridad a los usuarios más allá de la fachada que resultó ser la incorporación de los nuevos vehículos y mejoramiento de las vías.

Cabe recordar que tras el accidente de Once el Gobierno decidió quitarle la concesión a TBA (Trenes de Buenos Aires) tanto del Sarmiento como del Mitre, y en su lugar, constituyó una unidad operativa de gestión para administrar las líneas. Sin embargo, también en esta etapa se refleja la inoperancia de quienes la manejan.

Junto a un spot audiovisual, el gobierno presentó hace un mes los prototipos de los nuevos trenes para las líneas Mitre y Sarmiento, en el que se informa sobre el comienzo del mejoramiento de los ferrocarriles metropolitanos: el primero, según la publicidad, fue el Sarmiento.

"Desde Once hasta Moreno se renovaron las vías y ya se siente en el andar de los trenes", reza el spot. También manifiesta el comienzo de "un plan de renovación y mantenimiento del material rodante existente" y que ya reacondicionaron "el 80% de los trenes que están circulando en la línea Sarmiento".



Sin embargo, hoy, una vez más, la negligencia de los funcionarios la terminó pagando el pueblo, con sus vidas. Hasta el momento fueron confirmadas tres víctimas fatales y más de 200 heridos producto del choque entre dos formaciones de la línea Sarmiento, en la estación Castelar, a las 7.07. Uno de los trenes, que iba hacia los talleres de Castelar, chocó con otro que estaba detenido en las vías.