Asaltan a comerciante que fue delincuente y estuvo preso, y que hoy ayuda a los detenidos

Durante el robo, uno de los asaltantes agarró del cuello al dueño, Carlos Barrese, de 74 años, y lo amenazó de muerte para que entregue el dinero de la caja.

La víctima logró zafarse y corrió a la calle para pedir ayuda y tras una persecución, los delincuentes fueron detenidos en 8 y 60, cuando se mezclaron con unos malabaristas.

El caso ocurrió cuando Carloncho abrió el negocio y caminó hacia el mostrador. "Sentí unos pasos y al darme vuelta había un tipo que me dijo: "Damela toda", contó el pizzero al diario Hoy.

Barrese relató conmocionado, que cuando le explicó al ladrón que no tenía dinero, el delincuente lo amenazó: "Sabés que te voy a matar. Te voy a desprender la cabeza del cuerpo".

En ese momento salió un empleado de la cocina y eso confundió a los delincuentes. Carloncho aprovechó para salir a la calle y pedir ayuda.

Poco después llegaron policías de la comisaría novena y atraparon a los ladrones. Se trata de tres jóvenes de 18, 21 y 28 años. A uno de los demorados le secuestraron una cuchilla entre sus ropas.

Carlos Barrese tiene una historia de vida inédita. Fue delincuente y estuvo preso hasta que cumplió 30 años. Permaneció privado de su libertad desde chico en Instituto de Menores y luego en distintos penales.

Al cumplir su última condena, decidió irse a Estados Unidos y allá aprendió el oficio de pizzero. En la década del 80' regresó al país y puso una cadena de casas de comidas.

En la actualidad, el comerciante visita las cárceles de la provincia de Buenos Aires para llevar un mensaje de esperanza. "En los últimos años estuve en conferencias y contabilicé que más de 12 mil presos escucharon mi historia", afirmó Carloncho, quien fue nombrado representante de Cáritas en los penales.