Quiénes son los tres rehenes argentinos que regresaron a Israel tras pasar más de 700 días cautivos por Hamas

Tres ciudadanos argentinos fueron liberados por Hamas este lunes a la madrugada, en el marco del acuerdo de alto el fuego alcanzado con Israel. Se trata de Eitan Horn y de los hermanos David y Ariel Cunio, quienes permanecieron secuestrados más de 700 días en Gaza.

La Cruz Roja Internacional supervisó el operativo de entrega y los rehenes ya se encuentran en territorio israelí, donde fueron recibidos por personal médico y por sus familias. En las últimas horas se difundieron las primeras imágenes de las videollamadas entre los liberados y sus seres queridos, momentos antes de reencontrarse.

Las primeras palabras de sus familias

La madre de los hermanos Cunio, Sylvia, contó entre lágrimas que pudo ver a sus hijos después de dos años: “No escuché casi nada por el ruido, pero no me importa. Están vivos, están libres”, dijo emocionada en una entrevista con la televisión israelí.

También reveló que en un primer momento rechazó la llamada porque no reconocía el número. Luego, al verlos, sintió un alivio inmenso: “Se los ve bien. La barba de David está un poco más blanca, pero eso no importa. Les dije que los adoro”, relató.

El grupo terrorista también acordó entregar los cuerpos de 26 rehenes fallecidos durante el cautiverio. Entre ellos se encuentra el argentino Lior Rudaeff, asesinado el mismo 7 de octubre cuando intentaba defender su kibutz.

Eitan Horn: el educador que sobrevivió al horror

Eitan Horn, de 39 años, fue capturado junto a su hermano Iair en el kibutz Nir Oz, uno de los más devastados por el ataque de Hamas. Su padre, el periodista argentino Itzik Horn, fue una de las voces más activas en la campaña por la liberación de los rehenes.

Durante meses no hubo noticias sobre el paradero de Eitan, hasta que en marzo de este año Hamas difundió un video donde se lo veía abrazando a su hermano antes de que los separaran nuevamente.


En ese material, Eitan pedía al gobierno israelí continuar con las negociaciones: “No destruyan nuestras vidas. Liberen a todos. Dile a mi madre y a mi padre que sigan luchando”, decía entre lágrimas.

Su madre, Ruth Chmiel, había relatado días atrás el sufrimiento de la familia: “Nunca pensé que llegaríamos a los dos años. Es imposible describir el dolor de no saber cómo está mi hijo. Lo único que deseo es tenerlo en casa para poder seguir adelante”.

David y Ariel Cunio: la familia partida por la guerra

Los hermanos David y Ariel Cunio también fueron capturados en el kibutz Nir Oz. 

David, de 33 años, es actor y fue secuestrado junto a su esposa Sharon Aloni Cunio y sus hijas mellizas Yuli y Emma, de tres años. Su esposa y las niñas fueron liberadas en noviembre de 2023 durante el primer intercambio de rehenes, pero desde entonces no se supo nada de él hasta ahora.

Ariel, de 26 años, fue raptado junto a su novia Arbel Yehud, que fue liberada en enero de este año. Antes del secuestro, alcanzó a enviarle un mensaje a su hermano mayor, que logró sobrevivir: “Estamos en una película de terror”, escribió antes de perder contacto.

Tras recuperar la libertad, Arbel declaró que vivía con el corazón dividido: “Desde el 7 de octubre no lo vi ni escuché su voz. Trato de ser su voz. Ariel merece vivir, merece volver”.

Lior Rudaeff: el argentino que murió defendiendo su kibutz

Lior Rudaeff, de 61 años, fue asesinado por miembros de Hamas mientras defendía su comunidad, Nir Yitzhak. Era conductor de ambulancia y médico voluntario. La mañana del ataque salió en su moto tras recibir una alerta del escuadrón de emergencia.

Antes de morir, alcanzó a enviar un último mensaje a su esposa, Yaffa, y a sus cuatro hijos: “Estoy herido”. Su cuerpo fue llevado a Gaza y recién ahora será repatriado.

La liberación de los tres argentinos —Eitan, David y Ariel— representa un símbolo de esperanza en medio de un conflicto que ya se cobró miles de vidas y mantiene a decenas de personas desaparecidas. En Israel, la noticia fue recibida con lágrimas, abrazos y banderas. “Bienvenidos a casa”, escribió el Ministerio de Exteriores israelí en X, en un mensaje que recorrió el mundo entero.