Pelea por el "voto joven", un botín de 9 millones
*Por Nicolás Wiñazki. El 30 por ciento de los ciudadanos que estarán en condiciones de votar en octubre, un porcentaje mayor del que hoy tiene en las encuestas buena parte de los precandidatos a presidente, son jóvenes de entre 18 y 38 años.
El Gobierno cuenta desde la semana pasada con el padrón provisorio para las elecciones. El definitivo estaría listo para mediados de abril. Un tercio de los votantes es considerado "joven", confirmó a Clarín el Director Nacional Electoral, Alejandro Tullio. Esa tendencia es similar a la de años anteriores, pero se le agregó una novedad: en las internas abiertas y obligatorias de agosto podrán votar quienes tengan en ese momento 17 años, pero cumplan los 18 antes del 23 de octubre, fecha de la elección general.
En teoría, por primera vez miles de menores de edad podrán sufragar, aunque sea en las primarias. Aunque ya varios jueces electorales, entre ellos María Servini de Cubría -con competencia en la Capital- advirtieron sobre la falta de tiempo para incorporar al padrón definitivo las "novedades" posteriores al 2009, entre ellas las de quienes en ese lapso cumplieron los 18. Las elecciones de octubre tendrán además otra singularidad respecto al rango etario de sus integrantes: según la Dirección Nacional Elecrtoral, sólo el 50 % de los votantes participó de elecciones recién a partir de 1983 .
Llegar al "voto joven" será clave para cualquier candidato que intente alcanzar la Presidencia en octubre. Los principales postulantes ya contrataron equipos para diseñar campañas en la Web , el ámbito virtual propio de la juventud. Twitter, Facebook, YouTube, Flickr, blogs, las elecciones presidenciales del 2011 serán las que más explotarán las potencialidades de la herramientas 2.0.
Néstor Kirchner fue uno de los primeros dirigentes nacionales en advertir que tendría que modernizarse para captar este cambio cultural y tecnológico que sacude a las sociedades de todo el mundo. En los meses previos a su muerte se encargó de darle más espacios, participación, poder, cargos y subsidios a las agrupaciones juveniles kirchneristas, entre ellas, La Cámpora. El Gobierno no tenía por esos tiempos los datos del padrón provisorio que confirman que un tercio de los votantes es "joven", pero ya entonces había intuído que debería buscar nuevos instrumentos para llegar a ese sector de la población. Los Kirchner habían ordenado al jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, a que estudie cuáles son las mejores maneras para penetrar políticamente en la red. La Casa Rosada midió que la mayor parte de los jóvenes se informa a través de canales alternativos a los medios tradicionales. Con todo, los K tienen poca injerencia en ámbitos habituales de militancia juvenil, como los centros estudiantiles, donde la izquierda marxista y el radicalismo pisan fuerte.
Los candidatos de la oposición también advirtieron el cambio generacional en los padrones y difuden sus ideas, spots y slogans a través de Internet. Mientras que en la TV aún está prohibido pasar videos de campaña, nada impide que se difundan a través de la red. Los candidatos se lanzaron a persuadir a más de 9 millones de votantes.