DOLAR
OFICIAL $816.08
COMPRA
$875.65
VENTA
BLUE $1.18
COMPRA
$1.20
VENTA

Narcoavión: "Soy inocente de los cargos"

El piloto argentino Gustavo Juliá, detenido hace un año en España por el caso del "narcoavión" con 944 kilogramos de cocaína, rompió el silencio.

Juliá, quien permanece alojado en una cárcel de Barcelona junto a su hermano Eduardo y al copiloto Matías Miret, afirmó que "desconocía totalmente" la carga del avión y expresó sentirse víctima de una "mafia" que había contratado sus servicios como empresario aeronáutico.

"Soy inocente de los cargos que se me imputan", remarcó el hijo del fallecido ex jefe de la Fuerza Aérea brigadier José Juliá, y aclaró que "nunca" asumió la "culpabilidad del hecho en cuestión", sí la "responsabilidad" por lo sucedido, dado a que era el dueño del avión.

Además, en una carta enviada el canal de televisión por cable C5N, buscó desvincular a los pilotos, Eduardo Juliá y Miret, de "todo tipo de responsabilidad".

"Nunca he asumido la culpabilidad del hecho en cuestión, sino la responsabilidad innegable que me corresponde como dueño de la aeronave", planteó el acusado, y agregó: "Asumir la total responsabilidad es un acto honorable y no implica el reconocimiento de delito alguno".

Juliá indicó que "desconocía totalmente" la carga del avión y señaló que había cerrado un acuerdo con un empresario español para transportar "software, documentación informática, obras de arte, joyas y posiblemente dinero".

"Creo haber sido utilizado por terceros para una operación. Me arrepiento de no haber indagado más (...) Me dejé llevar por el poder económico de esta gente", expresó.

"El poder económico que tienen estas mafias es impresionante y también lo es su creatividad a la hora de lograr sus objetivos", remarcó en su carta.

Juliá indicó que después del vuelo a España, donde resultó detenido junto a su hermano y a Miret, pensaba ofrecer su avión para "la campaña política 2011" en Argentina y "trasladar a empresarios en trayectos importantes".

Por otra parte, dijo que con Eduardo están "distanciados" de Miret en el penal de Barcelona, aunque expresó que ambos pilotos "deberían estar sobreseídos".   

"Mi caso personal es diferente (...) Reconozco que tendré que afrontar el juicio", sostuvo Juliá, aunque entendió que debería ser excarcelado.

Acerca de Miret, aseguró que el copiloto "ha tomado la errónea decisión de defenderse culpando a los demás".

Los tres argentinos detenidos desde hace un año en España fueron procesados por el transporte de 944 kilos de cocaína desde Buenos Aires a Barcelona e irán a juicio por el caso en junio próximo.

Además de los hermanos Juliá y Miret, la misma suerte correrán tres responsables del servicio de tierra del Aeropuerto de El Prat.

Para la legislación española, en el juicio los tres argentinos podrían afrontar penas que llegarían a los 10 años de prisión.

La jueza del tribunal segundo de El Prat de Llobregat, Laura Balagero, es la encargada del caso en el que se investiga otras ramificaciones de una importante red de narcotraficantes.