Los terribles finales en las relaciones de Laura Miller: ¿víctima o victimaria?

Laura Miller fue conocida a fines de la década del '90 por realizar una versión de "Como lo hice yo", el tema de Sandro pero con ritmo electro-pop.

Esa canción formaba parte de su primer disco "Un camino para ti". Para ese entonces, Laura, era una chica de poco más de veinte años que previamente había trabajado como actriz en televisión. Una de las primeras participaciones que hizo fue en "Canto rodado", una novela para adolescentes que iba por las tardes en la pantalla de canal 13, allá por el año 1993, protagonizada por Gigi Rua, Raúl Porchetto y Mauricio Dayub.

Allí, Facundo Arana, Damián De Santo, eran parte del elenco. Laura los conoció y en ese mismo año, salió con Facundo. La relación no terminó de la mejor manera. Si bien el rubio actor nunca se refirió a la cantante, algunos testigos del vínculo afirman que "lo volvía loco" con sus celos y se separaron al poco tiempo.

Luego, llegó a la vida romántica de Miller, nacida como María Laura Barrientos, hace 42 años, otro actor: Damián De Santo, con quien tampoco finalizó su relación en muy buenos términos. Alguna vez, allegados a la pareja contaron que "con él vivió una relación mucho más larga, y también mucho más complicada, en donde no faltaron los celos de Laura y su ya famosa 'intensidad'". Damián no quiere hablar de la historia por los malos recuerdos que tiene de la misma.

En 2011 se casó por civil con un rugbier, Sebastián Mandaradoni, entrenador de Obras Sanitarias. El matrimonio duró siete meses y si bien se conocían desde la adolescencia, se casaron a los pocos meses de estar saliendo. Y adivinen qué: la relación tampoco acabó bien. Laura Miller contó en una entrevista: "Recién ahora puedo decir que estoy bien, me siento fantástica porque necesitaba separarme. Hace tres meses corté con mi marido después de vivir un año y medio de infierno".

Laura siguió: "Mi ex marido era una persona que tenía muchísimos problemas en su vida y afectaba la mía directamente. No puedo contar qué problemas había porque tengo miedo de que cualquier palabra de más me pueda jugar en contra. El estaba lleno de problemas por todos lados y tuvo una falta total de inteligencia para manejarlos". Y agregó: "¿Si me arrepiento de haberme casado? Totalmente. Estoy convencida que fue el gran error de mi vida".

"Por suerte, con mi ex sólo me casé por Civil, así que me guardo el vestido blanco y la Iglesia para alguien que lo merezca", cerró la cantante. Y cumplió su promesa en 2016 cuando se casó con Nicolás Traut, pero antes hubo más.

El tercer famoso con el que salió fue Matías Santoianni en el verano de 2012, recién separada de Madaradoni se fue a hacer teatro a Villa Carlos Paz. "Salí cuatro veces y no me la fumé más, todo bien, pero es imbancable", le dijo en algún momento Santoianni a su otro ex, Romeo Turrín.

Y si de Romeo Turrín hablamos, aquí comenzó realmente el paseo mediático de la artista. En mayo de 2015, Laura apareció en los medios con una grave denuncia: "Hace cuatro meses que yo lo dejé y hace dos meses no paraba de volverme loca. Me tocaba el timbre a las dos de la mañana, me perseguía por todos lados, me mandaba 700 mensajes o llamadas, era insoportable. Pasaba del 'te amo, sos el amor de mi vida' al 'sos una reverenda hija de...'. No me dejaba vivir, salía con miedo a la calle. Estoy con ataques de pánico".

En aquel momento, todos le creyeron a Miller. De hecho, fue una de las abanderadas de la primera marcha #NiUnaMenos, en contra de la violencia de género.

En diciembre de 2016, se volvió a casar, esta vez con el piloto de Super TC 2000, Nicolás Traut luego de nueve meses de noviazgo y cuando parecía que todo marchaba con viento a favor, fue detenido el 18 de abril, acusado de hackear las cuentas bancarias de la municipalidad de 25 de Mayo por más de tres millones de pesos.

Y si bien ella en su momento dijo que sospechaba por "sus ausencias, cuando no podía localizarlo en el teléfono, pensaba que era producto de infidelidades, que tampoco descarto. Había también amigos que andaban en cosas raras, pero nunca me imagine esto", hace unos días salieron a la luz unas escuchas telefónicas en la que se la oye reclamándole que nunca llegaba a almorzar y luego que, por entonces su marido, le dijera que tenía que cortar la comunicación porque estaba "haciendo unas cosas en el banco" su respuesta la metió en problemas: "'Robando' querrás decir", sembrando la duda sobre si ella conocía o no las actividades de su pareja.

Ayer el escándalo llamó nuevamente a su puerta cuando sus últimos dos ex, Turri y Traut, se cruzaron en televisión y la destrozaron: "Estuve tres años con ella. A los tres meses de la relación ella vino a vivir conmigo y ahí empezó la locura. Es una mujer macabra y diabólica. Hacía escándalos, se desmayaba y está mal psicológicamente. Cuando le dije que se fuera porque nos estaba yendo mal, se aferró al bidet como una nena y con mi hermana y mi mamá, no la podíamos sacar".

Traut afirmó: "Esperaba que ella me visite en la cárcel, pero no lo hizo. El mismo día que recibí la excarcelación, me entero por los medios que Laura estaba presentando el divorcio. Me sorprendió mucho".

Así, nuevamente, termina de la peor manera un romance de Laura Miller: ¿víctima o victimaria?