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Las 10 mejores bromas del Día de los Inocentes

DiarioVeloz te acerca chistes que podés hacerle a tus amigos en esta jornada tan especial y típica.

Llegó el Día de los Inocentes. Esperado por muchos, durante 24 horas los bromistas desplegarán todo su arsenal para reírse de otras personas.

Si vos sos uno de los que habitualmente sufren, DiarioVeloz te acerca 10 bromas que podés usar sobre aquellos que suelen disfrutar a costa tuya.

¡Mirá las mejores bromas para el Día de los Inocentes!

_ Cambio de azúcar por sal: un clásico. ¿Te piden un café? En vez de azúcar ponele sal, sentate y disfrutá. La cara de asco que pone el que sufre la broma no tiene precio.

_ Cambiar las horas del reloj: aprovechá mientras la víctima duerme, y adelantale el reloj una hora. Que la alarma suene antes, sólo eso. Así perderá una hora de sueño y vos vas a disfrutar con una larga carcajada. También podés retrasarle una hora, y así hacer que llegue tarde a su destino... pero es tu decisión.

_ El truco de la moneda: ¿querés reírte un rato con un pequeño sufrimiento del otro? Mirá. Pegá una moneda o un billete al suelo. Cuando alguien se agache a agarrarlo le va a ser imposible, y vos vas a estar disfrutando ese momento. Sino, atale una cuerda y empezá a tirar para que la persiga sin poder alcanzarla.

_ Pasta de dientes: mientras la víctima duerme, aprovechá para ponerle dentífrico en la cara y las manos. Así, cuando se despierte se va a desesperar al verse manchado, hasta que le digas que era una broma.

_ El dedo en la fruta: si tenés tiempo libre, no te pierdas esta broma. Cortá por la mitad un durazno o una manzana. Tenés que convencer a la víctima de que, con los ojos cerrados, adivine qué parte del cuerpo estamos señalando. Cuando haya acertado en zonas fáciles como la boca o la oreja, hacé que meta el dedo en la fruta.

_ El timbre: tenés que trabar el timbre de tu casa con un escarbadientes, para que no pare de sonar ni por un instante, y así desesperar a tus vecinos. Pero ojo, ¡también te podés cansar vos!

_ La mochila pesada: cuando la víctima se distraiga, tenés que poner piedras o elementos pesados en la mochila o valija que lleve. Cuando la quiera levantar le va a ser imposible y vos ya vas a estar riéndote.

_ El asustador: es tan vieja como simple. Consiste en esperar a que la víctima se acerque a un lugar, esconderte detrás de la puerta o en un rincón, saltarle encima y ¡sorprenderla!

_ El cartel: fácil, tenés que pegarle un cartel con un mensaje en la espalda de la víctima. Desde un mensaje hasta "pegame" está permitido. Todo te va a hacer reír.

_ La llamada: clásica. ¿Querés hacer enojar a alguien? Pedile a algún conocido que la víctima no conozca que la llame y le haga bromas por teléfono hasta que te canses de tanto reírte.