La vida de Leonardo Fariña como testigo protegido: amigos, psicoanálisis, asados y ¿nueva declaración?
El valijero k salió de la cárcel y poco a poco logró reinsertarse en la sociedad. A su vez, prepara otro embate judicial.
"Ya circulo por la calle con cierta cotidianeidad, aunque siempre con las medidas de seguridad necesarias. Me veo con frecuencia con mi círculo íntimo; mi padre, mis abogados y algunos amigos incondicionales", expresó, según Clarín.
En ese sentido, el valijero reveló que, lejos de los excesos de la vida anterior a la prisión signados por modelos pulposas y coches deportivos, se encuentra en un proceso terapéutico de rehabilitación psicológica.
"Estoy recuperándome física y psicológicamente tras el deterioro que tuve en la cárcel. Primero tengo que mejorar mis valores clínicos, y después comenzaré a entrenar. De todo se encarga el ministerio, como así también de mi tratamiento psicológico, clave para ir estabilizándome", comentó.
Asimismo, Fariña afirmó que no dedica su tiempo exclusivamente a actividades ociosas y a las relaciones interpersonales, sino que también estudia la causa por la que estuvo preso durante casi dos años de manera preventiva para poder brindar más detalles de la compra del mentado campo, que deslizó que podrían ser cruciales en la causa de la Ruta del dinero K.
"Estoy preparando mi ampliación indagatoria respecto a la compra del campo de Mendoza, para aportar la prueba necesaria sobre la adquisición y posterior venta. Voy a explicar los roles del empresario Carlos Molinari en las diversas operaciones Y de Roberto Erusalismsky, del que poco se sabe y tiene un rol trascendental en la venta y otras operaciones", adelantó.