El hijo de Corrado: baterista "in love"
Cuando apenas tenía 6 años, su padre le regaló una batería y sin mucha coordinación al principio, arrancó con sus primeros golpes sobre los platillos. Hoy Lucas Corrado tiene 22 años, una banda y un amor propios.
"Cuando muy joven, papá tocaba la guitarra. Era un verdadero rockero, según nos contó. Por eso fue él quien me enseñó los primeros ritmos y quien inculcó a todos sus hijos el amor por la música", asegura con una sonrisa y una seguridad que no precisan de ADN.
Con jeans, remera, camisa y zapatillas, Lucas bien podría haber seguido los pasos de su famoso padre Gabriel Corrado (50). Sin embargo, aunque desde pequeño supo acompañarlo a grabaciones y vivió muy de cerca las mieles de la vida nómade de un actor, las ambiciones artísticas de Lucas se inclinaron por otro lado y no dudó en tomar el fuerte compromiso de la música.
Siempre contando con el incondicional apoyo de su papá, de su mamá, Constanza Feraud (42), y de sus hermanas, Lucía (20) y Clara (16), armó su primera banda mientras estu diaba en el Saint Mary of the Hill’s College. Aunque recién a principio del año pasado se propuso firmemente crear un grupo que se preparara para comenzar a recorrer un camino profesional.
"Así nació Malcom con veinte temas propios. Nos reunimos un grupo de amigos del colegio y de la vida y la formamos hace un año. Hoy, junto con Eduardo Carini, que es cantante y guitarrista y Andrés Constantin, en guitarra y segunda voz, ya tenemos grabado nuestro primer demo y salimos elegidos en sexto lugar como mejor banda de rock pop de toda la Argentina, en un encuentro que se realizó en el Hard Rock", cuenta entusiasmado Lucas. A su lado, una rubia de perfecta sonrisa lo acompaña como su mayor fan.
"También hace un año, coincidentemente, con Lucas nos conocimos en un boliche de Mar del Plata. Yo estudio abogacía, pero igual nos acompañamos en todo. Me encanta ir a verlo cuando la banda toca en algún lugar y estar a su lado apoyándolo. Pasamos todo el tiempo que podemos juntos, incluso, tenemos un proyecto que va más allá de la música y de los estudios de cada uno, que es nuestra propia marca de ropa. Nos enganchamos a hacer esto también juntos, y nos apasiona", asegura verborrágica Sofía Aldrey, nieta de Florencio Aldrey Iglesias, dueño del hotel Hermitage de Mar del Plata, entre otros, y de multimedios.
Más allá de la música, Lucas está cursando tercer año de Economía Empresarial, en el Di Tella, y asegura que en cada uno de los pasos que da, cuenta con el incondicional apoyo de sus padres.
"Papá y mamá siempre que toco van a verme. En mi casa la música ocupa un lugar muy importante. A mis hermanas también les gusta la música.
Lucía toca el clarinete y Clara, la flauta. Así es que tenemos un hogar muy sonoro...", concluye Lucas, el heredero de los Corrado.
Con jeans, remera, camisa y zapatillas, Lucas bien podría haber seguido los pasos de su famoso padre Gabriel Corrado (50). Sin embargo, aunque desde pequeño supo acompañarlo a grabaciones y vivió muy de cerca las mieles de la vida nómade de un actor, las ambiciones artísticas de Lucas se inclinaron por otro lado y no dudó en tomar el fuerte compromiso de la música.
Siempre contando con el incondicional apoyo de su papá, de su mamá, Constanza Feraud (42), y de sus hermanas, Lucía (20) y Clara (16), armó su primera banda mientras estu diaba en el Saint Mary of the Hill’s College. Aunque recién a principio del año pasado se propuso firmemente crear un grupo que se preparara para comenzar a recorrer un camino profesional.
"Así nació Malcom con veinte temas propios. Nos reunimos un grupo de amigos del colegio y de la vida y la formamos hace un año. Hoy, junto con Eduardo Carini, que es cantante y guitarrista y Andrés Constantin, en guitarra y segunda voz, ya tenemos grabado nuestro primer demo y salimos elegidos en sexto lugar como mejor banda de rock pop de toda la Argentina, en un encuentro que se realizó en el Hard Rock", cuenta entusiasmado Lucas. A su lado, una rubia de perfecta sonrisa lo acompaña como su mayor fan.
"También hace un año, coincidentemente, con Lucas nos conocimos en un boliche de Mar del Plata. Yo estudio abogacía, pero igual nos acompañamos en todo. Me encanta ir a verlo cuando la banda toca en algún lugar y estar a su lado apoyándolo. Pasamos todo el tiempo que podemos juntos, incluso, tenemos un proyecto que va más allá de la música y de los estudios de cada uno, que es nuestra propia marca de ropa. Nos enganchamos a hacer esto también juntos, y nos apasiona", asegura verborrágica Sofía Aldrey, nieta de Florencio Aldrey Iglesias, dueño del hotel Hermitage de Mar del Plata, entre otros, y de multimedios.
Más allá de la música, Lucas está cursando tercer año de Economía Empresarial, en el Di Tella, y asegura que en cada uno de los pasos que da, cuenta con el incondicional apoyo de sus padres.
"Papá y mamá siempre que toco van a verme. En mi casa la música ocupa un lugar muy importante. A mis hermanas también les gusta la música.
Lucía toca el clarinete y Clara, la flauta. Así es que tenemos un hogar muy sonoro...", concluye Lucas, el heredero de los Corrado.